Songlist Help Flash III: San Valentín on the road

Podríamos decir que, cada 14 de febrero, el mundo se divide en dos clases de personas: las que adoran San Valentín y las que salen corriendo con solo oír esas dos palabras. Por supuesto, la mayoría nos situamos en algún lugar intermedio. No nos gustaría que nuestra pareja nos sorprenda apareciendo de repente en nuestra oficina, vestida de Cupido, con flechitas y todo, pero que tenga un detallito no está nada mal. Por ejemplo, una lista de canciones románticas para escuchar en el coche.

O donde uno quiera, claro.

Nuestro top 10 de canciones de San Valentín

Como hicimos en las ocasiones anteriores, nuestra idea es proponeros una lista de canciones variada, un poco sorprendente pero sin obviar grandes clásicos y, por supuesto, sin repetir artista. En este caso, también hemos dejado fuera algunos “temazos” por razones de seguridad vial; por ejemplo, no hemos incluido “Qué difícil es hacer el amor en un Simca 1000” porque al volante hay que estar a lo que se está, con todos los sentidos puestos en la conducción.

Vamos con la lista de San Valentín.

10. DRIVING YOUR GIRLFRIEND HOME, MORRISSEY (1991)

Parafraseando a Raymond Carver, nos preguntamos: ¿de qué hablamos cuando hablamos de canciones de amor? Porque en la mayoría de canciones “románticas” encontramos otros sentimientos: soledad, nostalgia, rechazo… Así que, ¿quién mejor para empezar nuestra lista que Morrissey?

En esta historia de desamor, mitad Jane Austen, mitad Ken Loach, mitad pagafantas (sí, son tres mitades: ya sabéis, el amor no entiende de matemáticas), Mozz está llevando a casa a la novia de otra persona. Ella dice “gira a la izquierda”, él gira a la izquierda. Ella dice: “Sigue”,  él sigue. Y escucha: “¿Cómo he acabado tan metida de lleno precisamente  en  la vida que había planeado evitar?” No hay respuestas en esta canción, una de las letras más infravaloradas del, muy a su pesar, mejor narrador romántico del pop.

Escucha el tema aquí.

9. BRAND NEW CADILLAC, THE CLASH (1979)

Debe de haber miles de canciones sobre amor en un Cadillac (y sobre sexo en un Cadillac ni te cuento). Lo mejor de ésta es el punto de vista: Vince Taylor, que la escribió en 1959, no se pone al volante. Es él quien se va a quedar tirado en la calle: “She ain’t comin’ back to me”. Ella se va a montar en ese cochazo (“I said, “Jesus Christ! Where’d ya’ get that Cadillac?”) y se va a marchar para siempre. Para muchos, esta fue la primera canción rock británica. Y por eso la eligieron The Clash para incluirla en su magistral “London Calling”.

Cambiando un poco la letra: ese blasfemo y muy punk “Balls to you, Big Daddy” de Joe Strummer no hubiera podido incluirse, de ninguna manera, en la grabación original de Vince.

Escucha el tema aquí.

8. LOVE IN A CAR, THE HOUSE OF LOVE (1988)

Para empezar, se pusieron el nombre de una novela de Anaïs Nin. Después, llenaron su repertorio de ruido, melodías que se derriten y romanticismo desesperado: “Destroy the heart”, “I don’t know why I love you”, “Someone’s got to love you”… Una mezcla de The Jesus & Mary Chain con Roxy Music, liderados no por un dandy seductor, sino por tu vecino del segundo, al que acaba de dejar, otra vez, su novia. Y es que la historia de The House of Love no tuvo, por supuesto, un final feliz. Como bien describe Joshua Klein, “parecían estar preparados para conseguir algo grande, que nunca llegó: tenían grandes canciones, tenían un gran sonido, tenían la actitud, pero al final todo se redujo a los cimientos de un pequeño culto”. Da igual. Desde Romeo y Julieta todos preferimos las historias de amor que no acaban bien.

Escucha el tema aquí.

7. I DROVE ALL NIGHT, CINDY LAUPER (1989)

Necesitamos urgentemente un revisionismo pop que ubique a Cindy Lauper en el lugar que se merece: muy, muy arriba. Muchos no pillaron en su momento el mensaje que “escondía” un tema tan perfecto como “Girls Just Want To Have Fun”. Como vivimos en tiempos poco sutiles, la propia Cindy se encargó de dejarlo bien claro en 2020, con la nueva versión: “Girls Just Want To Have FunDamental Rights”. Lo mismo ocurre con “I Drove All Night”, un tema que supo hacer suyo: “Me gustaba la idea de una mujer al volante, de una mujer en control”. Y es que la canción fue escrita para que la grabara Roy Orbison, pero nunca la publicó en vida. La versión de Cindy fue un éxito instantáneo; ese “I drove all night / to get to you” es casi tan recordado como el consejo de seguridad vial mas mítico de la historia de la televisión: si bebes, no conduzcas.

Escucha el tema aquí.

6. 
   

   BORN TO RUN, BRUCE SPRINGSTEEN (1975)

Otra constante de las canciones románticas es la huida. El amor como escape / refugio de las insatisfacciones de la vida cotidiana: no te gusta tu curro, pero paga tu parte del alquiler. Sustituye alquiler por un coche de segunda mano en una carretera interminable y ya estás en el universo Springsteen, ese romántico idealismo con los pies en la tierra. “Born to run”, la mejor canción del Boss según Rolling Stone es, en realidad, mucho más que una eso: una actitud ante la vida, un himno a una juventud eterna. “Debemos marcharnos mientras seamos jóvenes / Porque los vagabundos como nosotros, hemos nacido para correr”.

Escucha el tema aquí

5. LLORANDO EN LA LIMO, C.TANGANA (2018)

Las súper estrellas también tienen su corazoncito. No, no solo piensan en el dinero. Y si no nos creéis, el propio C. Tangana os saca de dudas: “Ey, perdí mis amigos / Mírame qué mono llorando en la limo / Canta conmigo / Que le jodan al dinero, quiero estar contigo / Ey, yo estoy enamorao del queso / Pero prefiero un beso, tu beso”. Quizás convenga aclarar, antes de seguir, que “queso” no es una referencia al producto lácteo. “Llorando en la limo”, con la producción de un viejo del madrileño, Alizzz, estaba incluida en “Avida Dollars”, la continuación de su disco de debut, “Ídolo”. Y es que, como todos sabemos, la falta de amor propio no es un problema para Antón Álvarez Alfaro.

Escucha el tema aquí.

4. VIAJE A LOS SUEÑOS POLARES, FAMILY (1993)

Hoy en día leemos artículos sobre el retorno del twee como una tendencia más de Tik Tok; conviene recordar que, por más naif, que pareciera, el movimiento surgido en el pop británico de la mano de, entre otros, Sarah Records era mucho más revolucionario. Un término que también encaja perfectamente con Family. Y de nuevo, no solo en lo musical: recordemos que uno de los miembros del dúo fue Javier Aramburu, figura imprescindible del diseño español. “Viaje a los sueños polares”, uno de los temas del único disco del grupo es, por supuesto, irresistible. Autopistas dibujadas en mapas imaginarios, que solo pueden llevarte a un lugar: “Donde miedos y temores se convierten en paisajes de infinitos abedules de hermosura incomparable / Donde siempre te querré”.

Escucha el tema aquí.

3. FAST CAR, TRACY CHAPMAN (1988)

A veces nos gusta reírnos irónicamente de ellas, pero también sabemos el poder que pueden llegar a tener las grandes historias de amor. Esa sensación de que hablan de nosotros, que reflejan cómo somos y cómo nos sentimos, por más que las haya escrito, cantado o filmado alguien a quien jamás conoceremos. “Nunca tuve un coche así”, cuenta Tracy Chapman, “pero he conocido a tantas y tantas personas que me han dicho que sentían que era su canción… Alguien me dijo  una vez que pensó que había tenido que leer sus cartas, que conocía demasiado bien su historia”. Y es que “Fast Car” lo contiene todo: desde la cruel injusticia de nacer con todo en contra al descubrimiento de cómo el amor puede darle, aunque sea fugazmente, sentido a todo: “Me acuerdo de cuando íbamos en tu coche, tan rápido que me sentía como si estuviera borracha, las luces de la ciudad desplegándose frente a nosotros, sintiendo tu brazo envolviendo mi  hombro…  tenía la sensación de haber encontrado algo… de que podía, podía ser alguien”.

Escucha el tema aquí.

2. RIDE, LANA DEL REY (2012)

Cuesta creer que llevemos solo diez años con Lana Del Rey (si descartamos alguna breve reencarnación anterior): “Video Games”, el single con el que nació el mito, se lanzó en Internet en junio de 2011. Desde entonces, no se ha parado de hablar, para bien y para mal, de Lana. Probablemente, la crooner más importante del siglo XXI. Desde aquel debut sobre una historia que no podía acabar bien (“Esa vida tenía algo de sublime, íbamos al trabajo y él jugaba con sus videojuegos.. pero tal vez todo era demasiado predecible”), hemos vivido mil historias llenas de glamour impostado, como todo glamour, nostalgia por momentos nunca vividos, esperanzas, encuentros y escapes. Ese enigma descrito en apenas unos metros de carretera:

“Escucho los pájaros en la brisa de verano / conduzco rápido / estoy a solas en la medianoche / He tratado de no meterme en problemas / pero tengo una guerra en mi mente”, precedido de una plegaria no atendida: “No me dejes ahora / No digas adiós / No me des la espalda”.

Escucha el tema aquí.

1. GREEN LIGHT, LORDE (2017)

La otra cara de la moneda: cuando la ruptura señala el comienzo de algo mejor: “Es el primer capítulo de los últimos dos salvajes y fluorescentes años de mi vida; aquí es donde empezaron”, en las propias palabras de Lorde. Aquí no hay escape, sino todo lo contrario: la necesidad de gritar un par de verdades a la cara. Ese “mentiroso, mentiroso” que se repite hasta diez veces después de las primeras líneas de la canción:

“Me maquillo en el coche de otro / pedimos bebidas diferentes en los mismos bares”. ¿Cuál fue el problema? ¿Te asustaste de lo que teníamos? “Creí escucharte decir que ibas a estar siempre enamorado / pero no lo estás, ya no”. Duele hacer lo que tienes que hacer, pero esta no es una historia de un corazón destrozado, sino de una valiente reconstrucción; el mantra “Estoy esperándola, esa luz verde, la quiero” no es una súplica, sino una profecía de auto cumplimiento. El “que te den” más brillante de la década.

Escucha el tema aquí.

¿Os ha gustado la lista, corazones? Eso esperamos. Y si no, estaremos encantados de quitar y poner lo que haga falta. Podéis encontrar nuestra playlist de San Valentín entera aquí.

Ya sabéis: podemos cambiar…