Seguro que alguna vez te has preguntado si está prohibido comer y beber mientras se conduce. Quizás te ha entrado hambre o sed en un viaje largo y has pensado en aprovechar un semáforo o una recta para saciar tu apetito.
O tal vez has visto a otros conductores hacerlo y te has indignado por su imprudencia. Sea como sea, la respuesta no es tan sencilla como parece.
Conducir es una actividad que requiere de toda tu atención y concentración. Sin embargo, a veces puedes sentir la tentación de comer o beber algo mientras estás al volante, ya sea por hambre, sed o sólo por costumbre.
¿Es esto legal? ¿Qué riesgos implica? ¿Qué dice la normativa al respecto? En este artículo te lo contamos todo.